El Camino Aragonés, es uno de los tramos de las Etapas del Camino Francés, y parte del Puerto de Somport (Huesca). Existen un total de cuatro vías de peregrinaje que parten de Francia para llegar a la provincia de Galicia y abrazar al Apóstol. De esas vías tres de ellas se cruzan en Roncesvalles, exceptuando esta.Se dice que este Camino se une con el resto en el Puente de la Reina, pero realmente junto al Camino Navarro, se hacen uno sólo se unen en la ermita de San Salvador, en la población de Óbanos.

Esta ruta cuenta con un total de 170 kilómetros recorriendo las provincias de Huesca, Zaragoza y Navarra hasta unirse con el Camino Navarro. Desde ese punto compartirá la ruta francesa. Durante seis etapas, el peregrino podrá recorrer una de las cuatro sendas jacobeas que ya era utilizada por los peregrinos de la Edad Media la Vía Tolosana. Parte de la localidad francesa de Arlés hasta el puerto de Somport, tratándose de la ruta jacobea más meridional de las cuatro que llegan hasta la Península.

A su paso, el peregrino disfrutará de unos paisajes increíbles y distintos en cada etapa. Se encontrará distintas localidad, hará un recorrido por su historia, su tradición y leyendas.

Historia

El Camino Aragonés no es el más antiguo que existe. Posiblemente data del siglo XI, cuando los primeros reyes de Aragón decidieron reconstruir y mejorar a red de comunicaciones de su territorio. Repararon vías romanas, construyeron puentes, así como albergues y baños en las rutas principales. El cambio fue impulsado por la llegada de peregrinos y viajeros al puerto de Somport. Era una red de carreteras y caminos con ramificaciones provenientes de zonas de Francia, Inglaterra, Italia, etc. La aparición de reliquias de carácter religioso hizo que aumentara el número de monasterios y santuarios. Esto hizo que se crearan nuevas rutas para aquellos peregrinos que tenían interés en acceder a las iglesias y poder contemplar los milagros del Camino de Santiago.

Señal en el Camino Aragonés

A partir del siglo XVI a causa de una serie de acontecimientos provocaron una bajada bastante notoria en la afluencia de peregrinos en esta ruta. Entre los acontecimientos que pudieron lo provocaron están los desacuerdos entre Europa y España por motivos religiosos. A causa de la militarización que supuso este conflicto las rutas estaban mucho más vigiladas y los peregrinos buscaron alternativas. Este Camino quedó obsoleto y algo en el olvido.

Etapas del Camino

El Camino Aragonés no es un itinerario fácil, puesto que además de no poder recorrerse en cualquier época del año. En invierno, más bien en los meses de noviembre hasta principios de abril no podemos escapar de las continuas nevadas puesto que atravesaremos los Pirineos. En los meses restantes la temperatura es mucho más agradable pero hay épocas en las que la ruta andando se hará bastante dura ya que las sombras escasean.

El acceso al punto de origen para comenzar el Camino es algo que no nos causará problema puesto que se puede hacer directamente en autobús desde Jaca. Será el primer día de un itinerario con un total de seis etapas hasta unirnos con el Camino Francés.

1.ª Etapa : Somport – Jaca (32 km.)

Comenzaremos nuestro Camino en el punto de inicio del que ya hablamos en pleno Pirineo, y recorreremos la mayor parte del kilometraje por la provincia de Huesca. Es la etapa más larga de todo el recorrido pero contamos con la ventaja de que transcurre en descenso casi todo el tiempo. Pasaremos por Canfranc estación y pueblo, Villanúa, Castiello de Jaca y finalmente Jaca.

2.ª Etapa: Jaca – Arrés (25,4 km.)

En esta segunda etapa seguiremos estando en Huesca. Tomando dirección hacia el oeste descendiendo el valle que llega a Santa Cilla y Puente de la Reina de Jaca. Tras ese cómodo descenso deberemos tomar aire y subir algo más de dos kilómetros hasta nuestro destino Arrés, una población de carácter defensivo

Arrés

3.ª Etapa: Arrés – Ruesta (28,4 km.)

En esta tercera etapa del Camino Aragonés nos adentramos en la provincia de Zaragoza, concretamente para llegar a Artieda, después al embalse de Yesa y culminar en Ruesta.

4.ª Etapa: Ruesta – Sangüesa (22 km.)

Nos espera un descenso para comenzar esta cuarta etapa desde Ruesta. A lo largo de unos ocho kilómetros aproximadamente ascenderemos por el monte Fenerol, unas vistas impresionantes del embalse de Yesa. Todo lo que sube baja, por lo que descenderemos hasta la calzada romana que entra a la villa de Undués de Lerda. Cruzaremos la separación entre Navarra y Aragón para finalmente llegar a Sangüesa.

5.ª Etapa: Sangüesa – Monreal (28,4 km.)

Saldremos de la localidad de Sangüesa avanzando por un camino despoblado entre sierras. A partir de Izco nos dirigiremos a atravesar la localidad de Abínzano, después la de Salinas de Ibargoiti. Finalmente llegaremos a Monreal, situado a los pies del gran monte de la Higa de Monreal.

Tramo del Camino Aragonés

6.ª Etapa: Monreal – Puente la Reina (30,4 km.)

La última de las etapas de este Camino Aragonés y al igual que la primera será una etapa larga y algo costosa. Su perfil está caracterizado por los desniveles de los primeros kilómetros. Por la Sierra de Aláiz seguimos la ondulada senda que nos llevará a conocer las poblaciones de Yárnoz, Otano, Ezperun, Guerendiáin, Tiebas, Muruarte y Olcoz.

Comenzará nuestro descenso hasta Enériz antes de llegar a Óbanos donde encontraremos la confluencia con el Camino Francés, y de ahí a la localidad de Puente la Reina, final del tramo de la ruta aragonesa.

Puente la Reina

Una ruta en la que el único inconveniente si hay alguno son los pocos habitantes que hay en sus pueblos, por lo que deberemos planificar las etapas muy bien y disfrutar de la peregrinación plenamente.

Un Camino que mantiene su esencia, sus paisajes de gran belleza  y la sensación de aislamiento, paz y libertad. Pocos mantienen ese aroma.

Y si prefieres una experiencia que estimule tu sentido de la vista, te recomendamos que camines por El Camino desde Tui a Santiago de Compostela