Caldas de Reis es una de las paradas más reconfortantes del Camino de Santiago en su ruta portuguesa. Famosa por sus aguas termales, ofrece a los peregrinos un lugar ideal para descansar, relajarse y recuperar energías antes de continuar su camino hacia Santiago. Situada en la provincia de Pontevedra, Galicia, esta pequeña localidad se destaca por sus aguas mineromedicinales, que han sido apreciadas desde tiempos romanos.

Puente romano de Caldas de Reis

El pasado romano de Caldas de Reis es evidente, con su puente donde pasa el Camino

Caldas de Reis: de Aquae Celenae a villa termal

Caldas de Reis tiene una larga tradición termal, que se remonta a la época romana. En aquel entonces, la localidad era conocida como Aquae Celenae, debido a sus aguas sulfurosas. Ya en la antigüedad, las aguas de Caldas eran reconocidas por sus propiedades curativas, especialmente para afecciones de la piel y respiratorias. Con el paso de los siglos, la ciudad se fue consolidando como un importante destino de bienestar, lo que la llevó a convertirse en una villa termal de renombre.

A lo largo de los siglos, las aguas termales de Caldas han sido un refugio para reyes, nobles y viajeros. En el siglo XIX, el balneario de la ciudad ya era considerado uno de los más prestigiosos de Galicia. Hoy en día, esta rica tradición sigue viva, y Caldas de Reis sigue siendo uno de los principales destinos termales en Galicia, especialmente para los peregrinos que buscan un respiro en su ruta.

Iglesia de Caldas de Reis

Iglesia de Caldas de Reis

Aguas termales mineromedicinales: propiedades y beneficios de las aguas sulfurosas

Las aguas termales de Caldas de Reis son conocidas por su alta concentración de minerales, particularmente azufre. Este componente le otorga a las aguas propiedades terapéuticas que ayudan a tratar una variedad de problemas de salud. Las aguas sulfurosas tienen un efecto relajante y desintoxicante, lo que las convierte en el tratamiento ideal para aliviar la fatiga muscular y las tensiones acumuladas durante el recorrido del Camino.

El azufre presente en las aguas de Caldas tiene efectos antiinflamatorios y antisépticos, lo que la convierte en una excelente opción para tratar afecciones de la piel, como eccemas y psoriasis. Además, las aguas termales de Caldas son muy beneficiosas para aliviar dolores articulares y musculares, comunes entre los peregrinos que caminan largas distancias. También se sabe que estas aguas ayudan a mejorar la circulación sanguínea, lo que favorece la recuperación del cuerpo tras un día de esfuerzo.

Los beneficios de las aguas termales de Caldas no se limitan a la salud física. Su capacidad para inducir una sensación de relajación profunda también favorece el bienestar emocional y mental. Los peregrinos que deciden detenerse en Caldas de Reis pueden disfrutar de una experiencia de descanso completa, mejorando no solo su cuerpo, sino también su estado de ánimo.

Puente sobre el río Umia

Puente sobre el río Umia

Balnearios históricos, fuentes y lavaderos

En Caldas de Reis, los peregrinos pueden disfrutar de dos balnearios históricos que siguen utilizando las aguas termales en sus tratamientos. Estos lugares no solo ofrecen un espacio para el bienestar físico, sino que también permiten adentrarse en la rica tradición termal de la región.

Balneario Acuña

El Balneario Acuña, también hotel y situado a la entrada del pueblo desde el Camino Portugués, es uno de los más conocidos de la ciudad. Este balneario destaca por sus aguas termales mineromedicinales, cloruradas sódicas bicarbonatadas, con propiedades terapéuticas, declaradas de Utilidad Pública en 1813. Sus aguas ayudan a tratar problemas respiratorios como asma y bronquitis, y favorecen la recuperación de dolencias reumatológicas aliviando dolores musculares y articulares.

El Balneario ofrece una amplia variedad de tratamientos, como programas específicos para patologías respiratorias y reumatológicas, con técnicas como aerosoles, duchas micronizadas y baños de vapor, todos ellos personalizados y supervisados por un equipo médico especializado. Las instalaciones incluyen termas, baños de vapor, masajes terapéuticos y una zona de relax, ideal para los peregrinos que buscan aliviar las tensiones acumuladas tras largas jornadas de caminata. La piscina termal exterior, al lado del río Umia y con aguas mineromedicinales, es uno de los lugares más populares, proporcionando un espacio perfecto para la relajación y el bienestar en un entorno tranquilo.

Balneario Acuña

Balneario Acuña

Balneario Dávila

El Balneario Dávila, ubicado en el centro de la ciudad, es reconocido por sus aguas mineromedicinales de características únicas, como su composición de cloruro sódico sulfurosas, fluyendo a una temperatura de 48ºC, lo que las clasifica como hipertermales. Estas aguas contienen minerales como flúor y manganeso, y son utilizadas principalmente para tratar afecciones respiratorias como faringitis, laringitis, rinitis, sinusitis, asma, y problemas reumáticos como tendinitis, fibromialgias. El balneario ofrece una variedad de tratamientos terapéuticos, que incluyen pulverizaciones, inhalaciones, duchas nasales, baños termales, y chorros a presión, todos supervisados por un equipo médico especializado. Además, dispone de servicios de estética, como peeling facial, hidratación y masajes terapéuticos, tanto faciales como corporales.

Su historia se remonta a 1780, cuando Don Joaquín Dávila y Mariño fundó la primera casa de baños. A lo largo de los años, el establecimiento ha evolucionado y en 1923 se inauguró el Hotel Balneario Dávila. Las aguas del balneario fueron utilizadas desde tiempos romanos, cuando los legionarios las empleaban para curar las fatigas del viaje y las batallas. Hoy en día, el balneario sigue siendo un lugar emblemático donde se aprovechan sus aguas terapéuticas para el bienestar físico y emocional.

Centro de Caldas de Reis

Centro de Caldas de Reis

La fuente pública de A Burga

En el centro de Caldas de Reis, junto al Balneario Dávila, se encuentra la fuente pública de A Burga, un manantial termal de acceso libre que permite a los peregrinos disfrutar de las aguas curativas sin costo alguno. La Fuente de A Burga forma parte de la rica tradición termal de la ciudad, que se remonta a tiempos romanos. Se cree que sus aguas ya eran utilizadas por los habitantes de la zona por sus conocidas propiedades curativas.

No solo está la fuente, sino también el lavadero público, que ofrece a los peregrinos la posibilidad de socializar mientras sumergen los pies en el agua caliente, que ayuda a mejorar la circulación sanguínea y a relajar los músculos, proporcionando un respiro necesario en su recorrido.

Un entorno relajante: ríos y jardines de Caldas de Reis

Caldas de Reis no solo es conocida por sus aguas termales, sino también por su entorno natural. La ciudad está rodeada de hermosos paisajes, con los ríos Umia y Bermaña que atraviesan el municipio. Estos ríos no solo crean un paisaje pintoresco, sino que también ofrecen oportunidades para realizar actividades al aire libre, como caminatas a lo largo de sus orillas por el paseo fluvial. El sonido del agua corriendo y el aire fresco de la zona contribuyen a la sensación de calma y relajación que se experimenta en la ciudad.

Además de los ríos, Caldas de Reis cuenta con numerosos espacios verdes y jardines donde los peregrinos pueden relajarse y disfrutar de la naturaleza. Es el caso del Jardín Botánico y la carballeira (robledal), un refugio perfecto para descansar y desconectar del ritmo acelerado del Camino. Los jardines, cuidadosamente cuidados, invitan a caminar tranquilamente entre sus senderos y disfrutar de un entorno lleno de paz y belleza. Y no olvidar la fervenza o cascada de Segade, una caida de agua que permite el baño en sus pozas naturales.

Los Jardines de Caldas

Los Jardines de Caldas

Disfruta del bienestar de Caldas de Reis

Para aprovechar al máximo las aguas termales de Caldas de Reis, los peregrinos deben tener en cuenta algunos consejos prácticos. Es recomendable reservar con antelación en los balnearios, especialmente durante la temporada alta, para asegurar un lugar. Los balnearios de Caldas de Reis suelen abrir durante todo el año, pero es conveniente consultar los horarios antes de la visita, ya que algunos ofrecen servicios adicionales como tratamientos de belleza o masajes terapéuticos, lo que permite disfrutar de una experiencia de bienestar completa. Por supuesto, no olvides llevar ropa cómoda y adecuada para el baño.

Caldas de Reis es una parada imprescindible en el Camino Portugués, no solo por su tradición termal, sino también por el descanso y la serenidad que ofrece. Sus aguas mineromedicinales, combinadas con un entorno natural espectacular, hacen de este destino un lugar único para recuperar fuerzas antes de continuar el Camino. Tanto los balnearios como la fuente pública de A Burga ofrecen a los peregrinos una oportunidad de revitalizarse, ayudando a mejorar la circulación y a aliviar la fatiga, lo que convierte a Caldas de Reis en un oasis perfecto en las rutas jacobeas y en el corazón de Galicia.