La vereda de la estrella es un antiguo camino que se construyó en 1890 para explotar las minas existentes en esta parte de Sierra Nevada. ¿Sabías que durante buena parte del siglo XX incluso llegaba un tranvía hasta el barranco de San Juan? Esta línea de ferrocarril de vía estrecha era conocida como “Tranvía de la Sierra”. Hoy ya no existen plataformas ni guardarraíles, pero si conservamos la huella en el relieve del paso de las locomotoras.
Una vez desmantelada esta función comercial de la ruta, los senderistas la recuperaron como una de las entradas a la sierra más hermosas que puedan existir en toda esta montaña. Y es que no es para menos, ya que en su recorrido el senderista puede observar con increíble admiración los imponentes y majestuosos crestones de los picos Mulhacén, Alcazaba y Veleta. En estas líneas te invitamos a descubrir más sobre esta “niña bonita” de Sierra Nevada.
El entorno de la vereda de la estrella: Sierra Nevada
La vereda de la estrella se sitúa en la media montaña de la Sierra Nevada de Granada. Concretamente, la vereda se ubica en la cabecera del valle del río Genil, en el barranco de San Juan. Este acceso a la montaña fue utilizado tradicionalmente como la forma de entrada natural a la montaña desde Granada. Los granadinos seguían el río hasta su nacimiento y así poco a poco iban adentrándose en la sierra.
Esta privilegiada ubicación de media altura en la imponente Sierra Nevada, hace que la vereda de la estrella conserve unos ecosistemas naturales fascinantes. Una flora y fauna que merece ser conservada para poder seguir disfrutando de ella durante mucho tiempo.
Güejar Sierra
Este es nuestro pueblo de referencia para llegar al inicio de la vereda. Es un típico pueblo blanco de la sierra andaluza, ubicado a poco más de 1.000 metros de altitud. El pueblo goza de unas vistas espectaculares al Mulhacén (3.482 m), pico más alto de la Península Ibérica.
Ruta de la vereda de la estrella
La ruta puede hacerse de manera circular o lineal. El recorrido consta aproximadamente de 20 kilómetros de distancia. Cabe señalar de entrada, que la ruta circular es mucho más dura a la hora de retornar al punto de inicio que la lineal. Actualmente, debido a la degradación de la señalización en la vuelta de la ruta circular, recomendamos solamente tomar este itinerario si se es perfectamente conocedor de por dónde hay que ir. Si no conocemos la sierra, la mejor alternativa es tomar el recorrido lineal.
Recorrido lineal
Comenzamos la ruta cruzando el puente sobre el río Genil e iniciando una subida a mano izquierda que nos conduce al sendero en altura sobre el valle. En esta parte existe una frondosa vegetación de transición atlántica, con especies como el quejigo, castaño, robles, fresnos… De hecho, el primer highlight de la ruta lo encontramos en “el abuelo”. El abuelo es un castaño centenario, apodado así cariñosamente por los senderistas.
Tras caminar alrededor de una hora, se llega a la confluencia con el río Vadillo, en donde podemos tomar una opción de bajada a la izquierda y otra que continúa recto a la derecha. Para el recorrido lineal tomamos la opción de la derecha. Poco a poco se dibujarán ante nosotros los imponentes picos Alcazaba y Mulhacén, en un paisaje que en este punto se hace llamar “Viso de las Nortes”. Seguiremos caminando hasta atravesar el puente sobre el río Guarnón para adentrarnos en el “Camino del Real”. Tras llegar a la Mina de la Justicia nuestro recorrido habrá llegado a su fin y emprenderemos el camino de retorno.
Recorrido circular
Iniciamos la ruta como en el recorrido lineal, a diferencia de que cuando lleguemos a la confluencia del río Vadillo, tomaremos el desvío a mano izquierda. Las indicaciones de esta senda son para llegar al refugio de Peña Partida. Este sendero desciende hasta la altura del río Genil para posteriormente subir por la “Cuesta de los presidiarios”. Tras culminar la subida de la dura cuesta de los presidiarios, seguiremos las indicaciones para llegar al refugio de la cucaracha. Tras pasarlo, se alzarán ante nosotros las majestuosas caras norte de los picos Alcazaba, Mulhacén y Veleta. Nuestro siguiente punto es el “Refugio del Aceral” y posterior cruce del barranco del Aceral. Después llegaremos hasta las inmediaciones del Barranco de Lucía hasta el río Real, en un punto conocido como “Majada del Palo”. Por último, nos dirigiremos hacia la Mina de la Justicia y el barranco del Guarnón, volviendo por el recorrido lineal explicado anteriormente.
¿Cómo llegar al punto de inicio?
Como hemos señalado antes, la ruta de la vereda de la estrella se inicia desde el Barranco de San Juan (Güejar sierra). Una vez hayas llegado por carretera hasta el centro de Güejar, deberás seguir las indicaciones desde allí para llegar hasta el Barranco, no tiene pérdida. El único problema reside en la estrechez de la carretera. Una vez hayas pasado el restaurante Casa Chiquito, la carretera se vuelve más estrecha y en algunos lugares hay desprendimientos de pequeñas rocas. Tened en cuenta que nos estamos adentrando en el encajamiento del barranco, así que ojo con los coches. La carretera finaliza en el restaurante Barranco de San Juan, por lo que recomendamos aparcar antes si encontramos sitio.
¿Qué preparación física necesito?
La vereda de la estrella es una ruta de media montaña, asumible prácticamente para todos los públicos. Aunque si no estás acostumbrado a realizar rutas con bastantes desniveles puede que te canses un poco. El trazado total de la ruta asciende a 20 kilómetros, por lo que consideramos que es perfectamente factible hacerla a lo largo del día, parando a descansar todas las veces que sea necesario.
Por otro lado, si quieres disfrutar del maravilloso entorno natural que se esconde tras esta ruta, pero no te sientes preparado para caminar tanto, puedes decantarte por realizar un pequeño tramo lineal de la misma. Escoge un punto hasta el que caminar y luego da la vuelta.
¿Cuál es la mejor época del año para ir?
La vereda de la estrella es una de las Santiago de Compostela Rutas practicable durante todo el año. No obstante, sí es cierto que en los equinoccios, primavera y otoño, es quizá su época más bonita. En primavera el paisaje es idílico, debido a la floración y a que la sierra aún conserva su blanco manto de nieve. Por el contrario en otoño el paisaje también tiene su punto gracias al juego de colores de la vegetación que se produce a consecuencia de la caída de las hojas. Además, podrás ver como la sierra comienza a cubrirse con su fino manto de nieve.
Si realizas la ruta en verano, recuerda llevar una buena cantidad de agua. Estás en Granada y los veranos son muy calurosos. Recuerda que la vereda es una ruta de media montaña, por lo que la altitud no te librará en este caso de las altas temperaturas.
Por último, si te animas a hacer la ruta en invierno, debes tener en consideración consultar el estado del sendero. Aunque sea un sendero practicable durante la estación invernal, sí es cierto que hay que ser muy cauteloso. Con las lluvias invernales es frecuente que se produzcan desprendimientos en algunas secciones de la senda. Además, en función de la cantidad de nieve y sobre todo del hielo, pueden ser necesarios el uso de piolets y crampones.
Consejos antes de hacer la vereda de la estrella
Como siempre, una buena hidratación es clave. También la ropa ha de ser acorde con la práctica deportiva y con la estación del año en la que realicemos la ruta. Recuerda que unos bastones de trekking pueden convertirse en tu gran aliado a la hora de iniciar subidas como la de la cuesta de los presidiarios. Si vas a hacer la ruta en invierno, ten en cuenta llevar el equipo necesario, tal y como hemos comentado antes.
Una vez terminada la ruta, si aún os sobran fuerzas, os recomendamos bajar a Güejar sierra a dar un paseo. Güejar sierra es uno de los pueblos de esta cara de la sierra con más encanto, sin nada que envidiar a los famosos pueblos blancos alpujarreños como Pampaneira o Capileira, ¡así que ya sabéis, aprovechadlo! En el mesón La Hacilla, podréis disfrutar de unas ricas carnes de caza de la sierra, o de su tradicional plato güejareño. Como dato, terminamos haciéndoos la boca agua: la morcilla de Güejar está exquisita.
Muy buena descripción