La Ruta del Cares es una de las más bonitas e impresionantes que podemos realizar en los Picos de Europa. Bautizada como la ‘Garganta Divina’, recorre 12 kilómetros (24 ida y vuelta) entre la localidad asturiana de Poncebos-Arenas de Cabrales y la leonesa de Caín.

Es una ruta relativamente asequible siempre y cuando sepamos los pormenores de la misma ya que, no en vano, el desfiladero creado por el río Cares, que divide el macizo central del occidental de Picos de Europa, está rodeado de montañas de más de 2.000 metros de altitud, por lo que depende de la época del año, nos será más o menos llevadera.

¿Cómo llegar hasta Poncebos y Caín?

Ruta del Cares Asturias
Si queremos empezar la Ruta del Cares desde Caín llegando desde Asturias, cogeremos la carretera N-625 en Cangas de Onís dirección Riaño. Allí encontraremos un desvío hasta Posada de Valdeón y de aquí a Caín. Desde León haremos lo mismo, llegando hasta Riaño y siguiendo las indicaciones anteriores.

Si nuestra intención es arrancar en Poncebos, nuestra primera parada será Arenas de Cabrales, a donde llegaremos por la AS-114. En el pueblo hay una bajada en la que cogeremos la carretera que nos lleva a Poncebos (son casi cinco kilómetros).

¿Por qué lado empiezo a hacer la Ruta del Cares?

Señalización ruta del Cares
La Ruta del Cares tiene como dificultad la longitud. Son 12 kilómetros sólo de ida, que nos llevarán unas tres o cuatro horas, por lo que si no estamos acostumbrados a caminar o no somos muy deportistas, quizá deberíamos plantearnos hacer sólo la ida, ya que 24 kilómetros se nos podrían hacer muy pesados.

Si decidimos hacer sólo la ida, la recomendación es empezar desde Caín porque desde la parte asturiana nos vamos a encontrar ‘la cuesta’, unos dos kilómetros de subida que, sin duda, es lo más duro de la ruta.

También es cierto que la zona de Caín, si no vamos a hacer la ruta de 12 kilómetros y queremos simplemente conocer una parte, es más espectacular. No olvidemos que iremos ‘encajonados’ entre una pared y un precipicio, con el río Cares abajo,  por un camino de entre uno y tres metros de ancho.

Si queremos hacer los 24 kilómetros, lo ideal es empezar por Poncebos, teniendo en cuenta que en plena temporada alta (julio, agosto o Semana Santa  está muy concurrido) nos va a costar mucho aparcar pese a los estacionamientos habilitados en la propia localidad y en Arenas de Cabrales donde un servicio de autobuses nos facilita el llegar a Poncebos.
 

12 consejos  y recomendaciones para hacer esta Ruta


Paisajes ruta del Cares

1. Elige bien la época del año.

Otoño y primavera son ideales por la temperatura y porque no está tan masificado el camino. En verano, sobre todo julio y agosto, y en Semana Santa, puede llegar a ser agobiante.

2. Lleva agua y comida.

No hay fuentes ni restaurantes a lo largo de la ruta por lo que lleva bastante agua, sobre todo en verano, y si vas a hacer la ruta despacio o de ida y vuelta, no te olvides comida. Recuerda recoger la basura y mantener la ruta limpia.

3. Usa calzado y ropa cómoda y adecuada a la época en la que hagas la Ruta del Cares.

No te olvides de que estás en alta montaña y un chubasquero y ropa de abrigo siempre deben ir contigo.

4. Lleva el móvil cargado.

En algunas zonas no hay cobertura pero es conveniente llevar el teléfono operativo por si ocurriese cualquier cosa.

5.  Niños, ¿sí o no?

Depende. En la Ruta del Cares no existen barandillas por lo que se recomienda que los niños tengan ya una edad apropiada y resistencia física suficiente. A partir de los 10 años es una buena ruta para realizarla con ellos pero si tienen menos edad pueden cansarse demasiado o ponerse en peligro si se sueltan. Se recomienda que los niños vayan sin mochila, de la mano y pegados al lado de la pared, si son pequeños en mochilas portabebés, y siempre controlados por la estrechez del camino, parando si nos cruzamos con otros senderistas y teniendo mucha paciencia.

6. No se puede hacer la ruta en bicicleta.

Está prohibido porque podríamos poner en peligro a los senderistas y hay zonas en las que molestaría mucho, por ejemplo en los túneles.

7. Vigila el tiempo.

Si vamos en invierno, debemos tener mucho cuidado con la nieve. Es raro que caiga en Poncebos pero sí en Posada de Valdeón, situación que imposibilitaría el acceder a Caín. Por otro lado, no olvidemos que estamos rodeados de grandes macizos y sus cumbres estarán nevadas en invierno, lo que significa que puede caer nieve o más delante, cuando se acerque la primavera, el deshielo nos juegue alguna mala pasada. Tanto el deshielo como la lluvia pueden arrastrar piedras y debemos tener precaución si la meteorología no nos es favorable

8. Perros, ¿sí o no?

Está permitido llevar a nuestro perro si va atado debidamente.

9. Si tienes vértigo, mejor no hagas la Ruta del Cares.

Caminos estrechos, precipicio a un lado y sin barandillas y puentes por encima del río Cares, no son grandes aliados para la gente con vértigo. La ruta no tiene ‘atajos’ ni se puede abandonar hasta no llegar a destino por lo que es recomendable no empezarla si no vamos a ser capaces de terminarla.
Puente en la ruta del Cares

10. Ojo con las cabras monteses.

A lo largo del recorrido es probable que nos topemos con cabras monteses, reinas de las cumbres en los Picos de Europa, por lo que debemos tener cuidado con los posibles desprendimientos de roca que puedan provocar. Además es preferible dejarlas tranquilas ya que son animales salvajes.
Cabras montesas ruta del Cares

11. Empieza pronto la ruta.

Sobre todo en verano, ya que las temperaturas van subiendo y es recomendable madrugar, no sólo para aparcar, sino para evitar agobios de gente en el camino y que el calor nos agobie.

12. Organiza la Ruta del Cares con antelación.

Es verdad que hay hoteles y restaurantes en los alrededores de Poncebos, como en Arenas de Cabrales, y en Caín pero, si vamos a querer quedarnos o comer en esas zonas, sobre todo en época de gran afluencia, es mejor hacer las cosas con tiempo para no llevarnos sorpresas.